Este cuento representa de manera muy clara la visión de Ricardo Piglia sobre las dos historias. “El hombre que ríe” es una narrativa corta con una historia intercalada. El narrador es un niño neoyorquino de 9 años que relata la historia del joven universitario John Gedsudski “el jefe” y su Club de comanches, eran 25 chicos que se juntaban luego del colegio para hacer excursiones y actividades deportivas. El jefe aprovechaba en algunos momentos del viaje para relatarles las hazañas fantásticas de El hombre que ríe, que lo consideraban como un súper-héroe y a ellos mismos como los únicos descendientes.
Un día el jefe trae a una chica al autobús, Mary Hudson su novia, quién va a provocar un giro abrupto en la concepción del grupo. Pero esta relación no logra prosperar y se pelean, terminando así también con la vida del héroe de los Comanches. Los chicos se ven desbastados e invadidos de una enorme soledad.
Salinger para narrarnos una simple ruptura, recurre a una segunda historia la del Hombre que ríe. Pero en realidad; ¿Quién vence el combate, El hombre que ríe o la historia del desengaño amoroso del Jefe?
Una historia lineal y con un gran trabajo descriptivo, lleva al lector a encontrarse nuevamente con los personajes heroicos de la niñez.
Un día perfecto para el pez banana es un cuento donde “la historia secreta se construye con lo no dicho, con el sobrentendido y la alusión”, como la teoría de Hemingway en el libro de Piglia; Formas Breves. La narración comienza con el llamado de Muriel a su madre, donde todo gira en torno a un sujeto, esposo de Muriel, que parecería estar enfermo. Pero en ningún momento del diálogo se dice qué tiene, quién es y por qué los padres están tan preocupados.
La historia 1 es el diálogo entre la madre y la hija, una charla bastante superficial; donde se marca el miedo de los padres, el tema de un auto y los arboles y los médicos, todo va a ir entretejiendo casi en secreto lo que sería la historia 2; la del “sujeto”. Este personaje que fue a la guerra, y hay volver se encuentra con su esposa que estuvo varios años esperándolo, pero el no es el mismo, las marcas de la vida le preparan un nuevo destino.
En el cuento recién se logra entender la trama cuando Seymour habla con Sybil (una nena que estaba en el hotel y parece conocer), juegan como si él tuviese la misma edad de la nena, (le cuenta la historia del pez banana), lo cual, denota un estado mental del personaje que no es el adecuado. Hasta en un momento da la sensación de que iba a asesinar a Sybil.
Es una historia que mantiene un tiempo lineal, un diálogo realista, que juega con el lector, trae lo misterioso, dándole un final que muchos podrían sospechar pero que no deja de sorprender.
“Hay algo en el final que estaba en el origen y el arte de narrar consiste en postergarlo, mantenerlo en secreto y hacerlo ver cuando nadie lo espera”, Salinger, desde el inicio muestra algo que no esta bien, plantea interrogantes; pero solamente al final se descubre que era lo se entramaba.
Rodolfo Walsh. Esa mujer
El narrador intenta averiguar dónde está el cadáver de una mujer y para ello confronta con el coronel que ha sido parte en el ocultamiento del cuerpo. Para este cuento, voy a traer nuevamente la cita de Hemingway sobre que “lo más importante nunca se cuenta. La historia secreta se construye con lo no dicho, con el sobrentendido y la alusión”. En el cuento, Eva Perón jamás es nombrada: está aludida. Lo más importante de una historia no debe ser nombrado. Y de esta forma juega Walsh en este texto. La Historia 1 en este caso es todo el diálogo del periodista y el coronel, y la Historia 2 va a preguntarse ¿Quién es esa mujer?, va a narrarse desde la alusión.
Fotos, sigue la relación de amistad entre Jacinto Tolosa (hijo de un viejo estanciero y político de la provincia) y Mauricio Irigorri, un muchacho que busca el motivo de su existencia devorándose la vida; aparece Paulina, quien alegra sus días, hasta que todo se trastorna. El relato, que tardó siete años en ser escrito, se relaciona, por sus personajes y su técnica narrativa, con ‘Cartas’, y es una de las pocas historias de amor, sino la única, que aparece en la bibliografía del autor.
En cuanto al tiempo de la historia mantiene una cronología lineal de los hechos, utilizando en muchos casos el recurso elíptico.
Piglia dice que “todo cuento siempre cuenta dos historias”, en este caso la Historia 1 narra la vida de Mauricio, desde sus primero años hasta su muerte; hechos que van a ir dando vida y forma a la Historia 2, la cual va a representar las distintas relaciones que mantiene el personaje principal, con su padre, su amigo Jacinto “el negro”, la familia de éste y en sí la vida de todo el pueblo.
Rodolfo Walsh. Los Oficios Terrestres
El cuento Los oficios terrestres con líneas autobiográficas, se desarrolla en un colegio de internados en las afueras de la ciudad. Walsh comienza narrando ese día tan glorioso donde la sociedad de Damas de San José iba a compartir con los muchachos del internado, un día perfecto de afecto. Un gran asado, postre y partido de futbol para decorar la tarde.
“El día siguiente al de Corpus Christi”; el relato va a centrarse en dos personajes, el Gato y Dashwood, quienes luego de la fiesta tenían que llevar “la enorme carga de al basural que estaba, tal vez a quinientas yardas de distancia, tras los empapados ampos, caminos y distante hilera de cipreses”. Aquí es donde se puntualiza la historia, es decir, en todo el recorrido de estos dos chicos. Donde se va descubriendo sus vidas solitarias, con padres anónimos, pero que ellos anhelaban tener algún día una familia.
La historia 1es el relato de la gran fiesta y la historia 2 hace hincapié en la soledad de estos chicos huérfanos.
En el momento del recorrido de los dos chicos, uno siente que de verdad nunca van a llegar y parece muy lejano el basural, todo reflejado en las descripciones y el relato. Es interesante saber que en realidad ese lugar no estaba tan alejado, ni las plantas tan altas, sólo que ellos eran chicos y Walsh busco representarlo como verdaderamente lo vio.
Raymond Carver. De qué hablamos cuando hablamos de amor
Los tres cuentos de Carver, ¿Por qué no bailas?, ¿De qué hablamos cuando hablamos de amor? y Una cosa más, representan y reflejan las relaciones familiares y de pareja. Las tres transcurren de noche y esta presente el alcohol como elemento de escape para bailar en el primero, para charlar en el segundo y en el tercero como algo más violento.
No me sentí a gusto con estos cuentos, no les encontraba explicación y un final entendible, será que nosotros debemos darle el significado que nos parezca.
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